LA AZOHÍA 2019: LO QUE VIENE ES MEJOR QUE LO QUE PASÓ
HAY QUIEN NECESITA RAZONES PARA IR A BUCEAR
NOSOTROS SOLO NECESITAMOS UN LUGAR.
Quien ha visto el fondo del mar, no lo olvida. Lo busca entre el cielo y la tierra, soñando con volver a verlo de nuevo.
No podemos negar que bucear en la Azohía nos hipnotiza más que a Paris Hilton los perros chicos, pero, sinceramente, si eres de ese tipo de persona capaces de apagar Internet y quedar en persona o no te apetece quedarte en el sofá de casa al despatarre iguanero deberías reservar ya tu plaza para alguna de las escapadas que hemos programado para este año.
La propuesta pinta mazo de retozona.
2019
fechas
del 17 al 19 de mayo
del 7 al 9 de junio
del 12 al 14 de julio
del 9 al 11 de agosto
del 20 al 22 de septiembre
del 4 al 6 de octubre
del 31 de octubre al 3 de noviembre
temporada baja
200€
temporada alta
(julio y agosto)
210€
El precio incluye:
- 2 noches de alojamiento en habitación doble.
- 1 comida, 2 cenas.
- 4 Inmersiones
El precio NO incluye:
- Suplemento por habitación individual.
- Inmersiones extras.
- Conceptos no especificados en “el precio incluye”.
Más información:
RESERVAS Y CONSULTAS
Zona de inMersión
Teléfono: 91 465 92 93
Móvil / Whatsapp: 637 76 17 87
Email: tienda@zonadeinmersion.com
¿Sabéis el cuento de los pastorcillos esteparios?, ¿No? Os lo cuento.
Estamos en plena estepa central. Un buen día las buenas gentes se despiertan y descubren que los demonios del mermeamasao han robado todos los calendarios, por lo que nadie podía saber cuándo llegaría el viernes (día de inicio de las escapadas de buceo) ni el sábado, ni el jueves… todos los días se mezclaban. Por supuesto, el consejo de sabi@s se reúne y tratan de decidir como averiguar cuando y como empezar la semana. Proponen echarlo a suertes, hacer una votación, o, incluso, que el viernes fuera un día distinto cada semana, así, al menos, acertarán alguna vez. El líder todopoderoso de los pastorcillos opina que hay que esperar una señal divina, pero claro, el resto dice que como se van a comportar a diario, si tendrían que estar agitados o tomarse horas libres para salir antes, o descansar, como si fuera un lunes… Total, que el caos empezaba a cundir entre la caterva. De repente, un hombre con aspecto de politoxicómano, tostado por el sol, y con barba de tres meses se abrió camino apoyado en unas muletas seguramente compradas en una farmacia de pueblo y dijo: Los viernes, los días de la escapada, el aire huele a sal. Las carreteras languidecen en un horizonte de excitación y el ansiamasá hace que te tiemblen las piernas. Y en efecto, ese día llegó. El aire olía a sal, el ansiamasá fluía por las venas y cada vez que la gente se subía en sus tractores con carenado (coches tipo SUV) todos creyeron al viejo. El viernes, había regresado. De manera que llamaron a Zona de inMersión para reservar una plaza para la escapada de fin de semana y les respondieron que, sintiéndolo mucho, estaba todo completo.
No me vayáis a venir ahora con embelesos de zangolotinos, que vosotros disponéis de wasup (637 761 787), de Facebook, de correo electrónico, de página web, de teléfono (914 659 293) o de piernas para venir a la tienda y reservar las plazas que tenemos disponibles.
VIENES Y REPITES, ES LO QUE SIENTES, NO QUIERES PARAR.
NO PUEDES CAMBIAR EL HECHO QUE, EL ANSIAMASÁ, NO ESTÁ TAN MAL.